Si eres amante de la arquitectura y la historia y estás de viaje por Cusco, tienes que experimentar la ruta del barroco andino. Hoy, redBus te muestra todo lo que tienes que saber sobre esta ruta para que la disfrutes al máximo.
La oferta turística de Cusco no solo comprende sus restos arqueológicos. Estas 4 iglesias con arquitectura barroco andina representan un legado artístico e histórico que tienes que agregar en tu siguiente itinerario de viaje.
La ruta del barroco comprende iglesias ubicadas desde la ciudad del Cusco hasta el pueblo de Canincunca, tomando el camino que conecta Cusco con la ciudad de Puno.
Para iniciar la ruta debes tomar buses locales que salen en la Av. De La Cultura hacia alguna de las iglesias que forman parte de la ruta. Otra opción viable es tomar un servicio privado.
Para llegar a la ciudad de Cusco, punto de inicio de la ruta del barroco, puedes recurrir a varias empresas de buses. Desde Lima, algunas de estas empresas son Transviza u Oltursa. Podrás encontrar pasajes desde los 60 soles.
Antes de detallar la ruta del barroco andino, es necesario aprender un poco qué es y qué características tiene este movimiento artístico.
El barroco andino es un movimiento que aparece en la época del virreinato del Perú entre los años 1680 y 1780. También es conocido como arquitectura mestiza, debido a que fueron los artistas mestizos quienes propulsaron este tipo de arquitectura.
El movimiento del barroco andino se propagó, principalmente, en las ciudades donde se realizaron las empresas evangelizadoras en el Perú como Cusco, Arequipa y Puno. Asimismo, se expandió también fuera de las fronteras peruanas, llegando hasta la ciudad de Quito.
El barroco andino tiene como principales características los temas propios de la cosmovisión andina, como el Sol y la Luna, que constituían los dos dioses Inca. Asimismo, se encuentran muchas decoraciones basadas en animales de la región, como el puma, la serpiente, la vizcacha y demás. El barroco andino, con una decoración muy recargada, mezcla motivos religiosos con las costumbres y mitología de la cultura andina.
La ruta del barroco está comprendida por 4 iglesias que se pueden encontrar en la ciudad del Cusco así como en la zona sur de este departamento.
La primera iglesia dentro de la ruta del barroco es el Templo de la Compañía de Jesús, ubicada en la Plaza de Armas de la ciudad del Cusco. Esta iglesia, junto con la Catedral, es considerada una de las más bellas edificaciones religiosas de la ciudad. Debido a esto, se considera que esta iglesia fue tomada como ejemplo para la realización de las demás iglesias cercanas.
La fachada está elaborada de piedra labrada y su altar se encuentra tallado en madera y forrado con pan de oro. Sin duda alguna, su edificación comprendió un trabajo altamente detallado y minucioso.
En su interior, asimismo, se pueden observar muestras de arte de la Escuela Cusqueña así como esculturas representativas del barroco andino. Entre estas piezas se puede destacar el matrimonio del sobrino de San Ignacio de Loyola.
Debido a su relevancia histórica y arquitectónica, si quieres visitar esta iglesia fuera de la ruta, la entrada tiene un costo de 10 soles.
La segunda parada se encuentra a 39 kilómetros de la ciudad del Cusco, en Andahuaylillas. Construido en 1610, la Iglesia de San Pedro Apóstol fue edificada sobre un santuario inca.
Las pinturas que se pueden observar en su interior se encuentran enmarcadas en pan de oro. Además, en el techo se pueden encontrar grabados que le han otorgado a esta iglesia el nombre y estatus de Capilla Sixtina de América. Al igual que el Templo de la Compañía de Jesús, en el interior de esta iglesia existen obras de la Escuela Cusqueña, con lienzos que grafican la vida de San Pedro y San Pablo. Entre las principales obras que se pueden observar se encuentran el Bautismo de Cristo y La Virgen del Rosario del artista Diego Quispe Tito.
Asimismo, posee dos órganos que pertenecen al siglo XVII, los cuales constituyen los más antiguos de toda América Latina.
La tercerca parada se encuentra en el pueblo de Huaro, a 43 kilómetros de la ciudad del Cusco. Esta iglesia fue construida en adobe y piedra en el siglo XVI.
En su interior se encuentran casi 50 piezas de pintura y escultura de la Escuela Cusqueña, en su mayoría realizadas por el artista cusqueño Tadeo Escalante. Sus muros y techos comprenden ornamentación con detalles en pan de oro. Entre las obras más importantes de la iglesia se encuentran la Sagrada Familia y La Escena del Juicio Final.
Asimismo, dentro de esta iglesia se puede encontrar el mural del infierno, el cual es considerado como el primer ejemplo de arte mural andino.
En el mismo pueblo de Huaro, también se encuentra la última parada de la ruta del barroco: la Capilla de la Virgen Purificada. En 1974, esta iglesia se condecoró como Patrimonio Cultural de la Nación debido a su relevancia para la historia nacional.
Esta iglesia se levantó en el siglo XVII en honor a la Virgen de la Candelaria. Sin embargo, se han encontrado restos arqueológicos en la zona que demostraría que ya existía allí un centro ceremonial y un cementerio prehispánico.
En el interior de la iglesia se pueden observar diversas pinturas con temas florales y con representaciones de animales del lugar.
Cusco tiene mucho que ofrecer: desde zonas arqueológicas mundialmente famosas hasta escenarios naturales por descubrir. A esta oferta se le suma la ruta del barroco andino, la cual ofrece un vistazo único del legado arquitectónico y artístico de la historia virreinal del Perú.
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