Ica se viste de felicidad durante el Festival de la Vendimia, que va del 2 al 10 de Marzo. En la tierra del vino, el pisco y la cachina, el cultivo de la uva es una fiesta que permite olvidar cualquier tristeza o dolor. redBus te trae todo lo que necesitas saber sobre esta popular celebración.
La Vendimia, o Festival de la Cosecha, se lleva a cabo en la ciudad de Ica durante las primeras semanas de marzo desde 1958 en honor a la fama de la región: los mejores vinos de calidad en Perú y los mejores piscos del mundo se encuentran en Ica. El aguardiente de uva peruano, el pisco, es originado en esta región.
Durante el festival, la ciudad y el campo se contagian de alegría a medida que abundan los eventos musicales que celebran el patrimonio afroperuano de la región, con concursos de marinera, desfiles del caballo de paso peruano, peleas de gallos, concursos de belleza, fiestas al aire libre todas las noches, espectáculos folclóricos, fuegos artificiales y, por supuesto, flujo libre de pisco y vino.
Para visitar la hermosa ciudad de Ica, situada a 303 km al sur de Lima, puedes tomar un bus, el cual tiene un costo aproximado de 40 soles con un recorrido de 5 horas. La ciudad de Ica disfruta de un clima cálido y seco. La temperatura promedio es de 27 °C en verano y de 18 °C en invierno. Además, tiene una excelente infraestructura hotelera y exquisitos restaurantes.
La vendimia es la fiesta dedicada a la uva, noble fruta que crece en los áridos campos de Ica y que, gracias a su calidad, permite producir los vinos más valiosos del Perú, transformando a Ica en una región productora de vinos por excelencia.
El corte de los racimos de uva es la principal atracción de la vendimia. Es un ritual completo que comienza con el cultivo y cosecha de la uva. Luego, las manos femeninas cortan los jugosos racimos que se depositan en cestas.
Después, las mujeres dejan su carga en la prensa (pequeño depósito en el que se pisa la uva para extraer su mosto, el jugo exprimido de la uva), donde los hombres descalzos entran, cantan y bailan sobre las uvas hasta que no queda ni una entera.
La historia de los viñedos en Ica se remonta a los años posteriores a la consolidación de la conquista del Perú, cuando los españoles se dieron cuenta de que era necesario tener algunos productos de Europa, entre ellos el vino.
Según el libro Ica… tierra del sol, de Liliana Osorio Osorio y Juan Rivera Tosi, fue Nicolás de Ribera, “El Viejo”, quien produjo en sus tierras de Tacaraca (Ica) el primer vino elaborado en el continente, llamado “aloque” por la variedad de uva que usó. A los españoles no les gustó este vino, por lo que decidieron elaborar un licor con el mosto, que tuvo un resultado espléndido.
Su fama traspasó las fronteras de América y comenzó a enviarse a España. Los barriles con el valioso licor se embarcaron desde el Puerto de Pisco, por lo que empezaron a llamarlo “Licor de Pisco” y, finalmente, solo “pisco”.
Durante el festival de la vendimia, en las propiedades campestres se ofrecen pachamancas y se llevan a cabo concursos de música criolla, pelea de gallos y exhibiciones de caballos de paso.
En la vendimia, además de pisco y vino, la gente bebe cachina, porque la fiesta no sería lo mismo sin ese jugo de uva madura, fermentado durante unos ocho días, suave y fácil de beber, pero también traicionero por su alto contenido alcohólico.
Grupos de jóvenes organizan procesiones llenas de deleite en las que desfilan numerosas agrupaciones de música y baile, y se llevan a cabo numerosas fiestas en las calles y en las plazas.
El desfile principal es el más concurrido, con carrozas y reinas de belleza locales e internacionales, que arrojan racimos de uvas. En el mismo también se lleva a cabo la elección de la Reina del Festival. Acompañada por sus doncellas, la Reina y su corte pisan las uvas en una tina de acuerdo a la tradicional tradición de extraer el jugo que eventualmente se fermentará.
Durante días, y como parte de las celebraciones, hay conciertos, fuegos artificiales, concursos de baile, ferias de alimentos y bebidas, ferias de artesanías y deportes extremos, como el sandboarding, cuyas competiciones puedes ver en las dunas en las afueras del oasis de Huacachina.
En la última noche se lleva a cabo la yunza, una danza tradicional cargada de reminiscencias y propicia para las declaraciones de amor. En medio de la misma, las parejas se toman las manos y caminan alrededor de un árbol, decorado con dulces, regalos y adornos. Beben cachina y danzan durante un buen rato. Luego, con el hacha que los hombres llevan en sus hombros, intentan cortar el tronco. Uno, dos, tres golpes de hacha. La pareja que logre hacer caer el árbol es la ganadora. Serán los mejor tratados durante la fiesta y se encargarán de organizar el próximo festival.
Pero eso no es todo. Los lugareños dicen que los ganadores de la yunza tienen la felicidad asegurada durante el año y, si la mujer es soltera, su destino final será el altar.
Definitivamente, querrás visitar una de las ferias de comida para experimentar la cocina de la región. Por supuesto, el ítem número uno en tu lista de degustación debe ser el aromático pisco peruano, pero también deberías probar otra famosa bebida local conocida como cachina. Junto con los licores, puedes degustar deliciosos dulces locales, como las famosas tejas, hechas de nueces o frutas confitadas, rellenas de caramelo y cubiertas con glaseado de azúcar.
Una recomendación final: prueba un chupe de pallares, un saltado, un picante de choclo y un tamalito de cerdo o pollo, platos deliciosos y típicos de la región iqueña.
Otra de las mejores actividades que los viajeros pueden realizar en la ciudad de Ica durante el festival es la Ruta del Pisco, que consiste en visitar las bodegas del valle para aprender sobre el proceso de creación de estos vinos y aguardientes artesanales y disfrutar de las degustaciones posteriores. Estos lugares suelen ofrecer excelentes promociones de precios para aquellos interesados en comprar pisco y vino.
Asimismo, durante el festival, las bodegas a menudo programan fiestas con pisoteo tradicional de vino, concursos de baile, peleas de gallos y más.
El Festival de la Vendimia es un buen pretexto para visitar Ica y descubrir los encantos de esta noble ciudad, fundada en 1563 por Jerónimo Luis de Cabrera como Villa de Valverde del Valle de Ica. De atmósfera republicana y calma rústica, Ica es una ciudad acogedora y eminentemente religiosa.
El Santuario del Señor de Luren es un destino obligado a visitar. El templo conserva la imagen del Patrón de la ciudad, un Cristo que se ha vuelto negro debido al humo del incienso. Asimismo, el Museo Regional de Ica muestra fósiles, momias y mantos de las culturas paracas y nazca. La Bodega Vista Alegre, fundada en 1857, es considerada la más grande del país, y la laguna Huacachina, un oasis a 5 kilómetros de la ciudad, es un paraíso natural que deberías visitar de todas maneras.
La Iglesia de La Merced, conocida como la Catedral de Ica, fue la última iglesia que los jesuitas construyeron en Perú antes de su expulsión. Fue reconstruida a fines del siglo XIX y contiene un altar de madera finamente tallado. Asimismo, el Centro Cultural de la Única se encuentra en un patio restaurado al lado de la catedral. Consiste en una galería de arte cuyas exposiciones en el interior son pequeñas, pero están llenas de talento local.
También puedes recorrer el cementerio de Chauchilla. Famoso por ser un escenario prominente en la película Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal, este cementerio contiene restos humanos momificados prehispánicos y artefactos arqueológicos, ubicados a 30 kilómetros (19 millas) al sur de la ciudad de Nazca, en Ica.
Camina por un oasis rodeado de dunas de arena y palmeras, pasea por los senderos de un cementerio preinca, estudia los misteriosos diseños de las Líneas de Nazca, disfruta de los leones marinos mientras retozan en las Islas Ballestas, siente la aspereza de la arena y el batir del viento en el Parque Nacional Paracas; todo esto es parte de la misma aventura: encontrarse cara a cara con la tierra del vino y el pisco.
¡Ya lo sabes! Este año, no te pierdas el Festival de la Vendimia en Ica, que se llevará a cabo próximamente, en marzo. Únete a las celebraciones y participa de sus desfiles, fiestas de música y baile y no olvides degustar del delicioso pisco y vino que caracterizan a la región iqueña.
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