Descubre con redBus todo sobre esta fantástica reserva natural en Ayacucho, que protege a la mayor población de vicuñas del mundo. ¡Recorre Pampa Galeras en tus próximas vacaciones!
La Reserva Nacional Pampa Galeras Bárbara D’Achille es el lugar más importante del Perú destinado al cuidado y mantenimiento de la vicuña. Está ubicado en el distrito y provincia de Lucanas, en el departamento de Ayacucho, con una altitud promedio de 4000 m. s. n. m. Tiene una superficie de 6500 hectáreas, pero su área de influencia abarca más de 60 000, por estar dentro de la comunidad rural de la provincia.
La reserva fue creada en 1967 con el objetivo de preservar la vicuña y, años después, en 1993, recibió el nombre de Barbara d’Achille en homenaje a la conservacionista asesinada por Sendero Luminoso. Es el lugar ideal para ver a la vicuña, una especie en peligro de extinción, pariente silvestre de las alpacas y las llamas. Esta es reconocida internacionalmente por su lana fina. La vicuña ha vivido durante siglos en el área de la reserva, que ahora se mantiene como su hábitat natural y contiene más de cinco mil especímenes.
Salvaje, elegante y protegida por el gobierno, la vicuña es el antepasado de la alpaca domesticada. Si tu visita a nuestro país incluye un viaje a las altas áreas alpinas de los Andes, seguramente podrás echar un vistazo a estos salvajes y hermosos camélidos sudamericanos. Son pequeños, con pelaje dorado que produce pequeñas cantidades de lana fina y muy apreciada. Con 12,5 micras de diámetro, la fibra de lana de vicuña es liviana, suave y extremadamente fina. En tiempos de los incas, solo la realeza podía usar ropa de vicuña.
En la reserva Pampa Galeras, las propias vicuñas no son fáciles de detectar. Cuando descubras una manada, las verás moverse como si fueran un solo organismo. Se agrupan y se desplazan rápidamente en una ola apretada, saltando con gracia a través de las colinas. Los machos son estrictamente territoriales, protegiendo sus parcelas de hierba mullida durante el día, para luego regresar a las alturas más rocosas a medida que cae la noche.
Su protección contra la caza ilegal está bajo el cuidado de las comunidades campesinas, cuyos miembros son entrenados constantemente por el Consejo Nacional de Camélidos Sudamericanos (CONACS).
La reserva nacional tiene la mayor cantidad de vicuñas del mundo. Además, es el lugar ideal para disfrutar de la flora y la fauna de este hermoso lugar cerca del cielo. Con el color verde característico del ichu, caminarás bajo un cielo azul intenso, delineado por diferentes tipos de cactus y colinas de piedras.
Podrás apreciar distintas especies de flora típica de la región, como la puya Raimondi (planta que puede llegar a medir hasta 12 metros de alto), pajonales, queñuales, gramíneas, quishuar, hierba de primavera, una variedad de arbustos, helechos y cactus. Los arroyos y lagos brillarán bajo el sol y verás a manadas de vicuñas cruzar por las praderas.
Aunque la vicuña es la especie más abundante en esta parte de Ayacucho, es posible ver pequeños grupos de guanacos pastando aparte de las vicuñas y alpacas. En los cursos de agua, y en diferentes estaciones, hay parejas de gansos andinos que se mantienen unidos hasta la muerte, así como chinchillas, zorros y vizcachas. También podrás apreciar aves salvajes como las águilas, ñandús, flamencos y los impresionantes cóndores, las aves voladoras más grandes del mundo.
Cada año, del 22 al 24 de junio, se celebra el Festival Internacional de la Vicuña en Lucanas, Ayacucho. Este es el mejor momento para visitar la Reserva Nacional, ya que incluye baile, bebida, música y ceremonias tradicionales. Podrás ser testigo y participar de las danzas de huayno, desfile de bailarines con vestimentas coloridas y el consumo de alimentos típicos como el choclo con queso y el rocoto relleno.
Durante este evento festivo, la población local celebra un ritual cuyos orígenes se pierden en el tiempo: el chaccu, que viene a ser la trasquila anual de la vicuña, practicada por los miembros de la comuna de la Reserva Nacional Pampa Galeras. Durante la misma, los aldeanos y los pastores crean cercas humanas gigantescas y con sonidos, silbidos, gritos y danzarines paños de colores, conducen a los animales dentro de un corral. Luego comienzan la tarea de esquilar a las vicuñas, obteniendo la lana más fina proveniente de cualquiera de los camélidos del mundo, antes de liberar a los animales al medio silvestre una vez más.
El chaccu, que data de la época precolombina, es una actividad ritual altamente estilizada que atrae a cientos de visitantes al año a Ayacucho. Las ofrendas, que incluyen lana de vicuña, se hacen a la Pachamama (Madre Tierra) y a los apus (espíritus de las montañas) para asegurar cosechas y animales fértiles para el próximo año.
Estos eventos están organizados por el CONACS, la Comunidad Campesina de Lucanas y su municipio de distrito. Buscan mejorar el valor de la vicuña como recurso nacional y reafirmar las costumbres, valores y prácticas campesinas de las comunidades de los Andes Centrales conectadas con este fino camélido sudamericano, con música, baile y platos típicos.
El festival ha atraído cada vez más a turistas nacionales y extranjeros, ya que es un símbolo icónico de la cultura de la región. En esas fechas, los pobladores también ofrecen un recorrido por la reserva de Pampa Galeras para enseñar a los turistas y locales sobre su programa de cuidado y protección de las vicuñas y demás fauna local.
Los viajeros que apoyan el turismo sostenible apreciarán el ritual de donar las ganancias de la venta de la lana para beneficiar a las comunidades involucradas. Esto a su vez promueve y alienta sus esfuerzos de conservación hacia la vicuña.
La reserva natural posee varias rutas de senderismo para los visitantes. Podrás disfrutar de un maravilloso entorno natural que combina diferentes zonas ecológicas, desde las colinas costeras con poca vegetación hasta la típica espesura que cubre las alturas de los Andes. Además, descubrirás ancestrales chullpas de piedra, pinturas rupestres y bosques secos.
También debes visitar el Museo de Sitio, que posee un centro de interpretación donde podrás apreciar una muestra de la flora y fauna silvestre, así como una galería fotográfica sobre el ritual del chaccu.
La Reserva Nacional se encuentra a unos 90 kilómetros de la ciudad de Nazca y a 870 km al suroeste de la ciudad de Ayacucho, siguiendo un camino empinado serpenteante que conduce a los Andes hasta una altura de 4200 m s. n. m. La ruta más corta para llegar es a través de la ciudad de Nazca. El trayecto desde Lima hasta Nazca demora alrededor de 8 horas en bus por la Panamericana Sur, y los pasajes cuestan entre 40 y 100 soles.
Una vez en Nazca, son alrededor de 3 horas de viaje ascendiendo cuesta arriba por un espiral de caminos y cerros. Por ello, es recomendable prevenir el mal de altura tomando un mate de coca con anticipación.
Debido a la importancia de Pampa Galeras y del medioambiente que protege, es considerada una de las Reservas Nacionales más valiosas de Perú. Por ello, las visitas son semirrestringidas y se debe pedir autorización para ingresar a los guardabosques en el centro de interpretación, ubicado en la misma reserva, si vas por tu cuenta. Por lo tanto, es aconsejable adquirir un buen operador turístico para que gestione los permisos.
¿Ya estás listo para partir? Ayacucho te está esperando para que disfrutes de sus decenas de atractivos turísticos. Si te gusta la naturaleza, el senderismo y toda actividad al aire libre, esta es tu oportunidad para viajar. Además, visita nuestro blog de viajes si deseas conocer otros destinos turísticos en el Perú. Allí encontrarás todo tipo de consejos, noticas, eventos y artículos de interés al respecto.
Créditos de portada: elcomercio.pe
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