Viaja en bus y descubre uno de los destinos más mágicos y fascinantes del Perú: Millpu. Ubicado en el departamento de Ayacucho, este paraíso natural es conocido por sus impresionantes piscinas naturales de aguas turquesas. Rodeado de montañas y vegetación exuberante, Millpu ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza y la aventura.

En este artículo de redBus, exploramos la magia de sus aguas, las leyendas que lo rodean, las actividades que puedes realizar, la importancia de su conservación, la mejor época para visitarlo, la gastronomía local y algunos consejos para que tu visita sea segura y responsable.

La magia de las aguas turquesas: ¿Por qué son tan especiales?

Millpu se encuentra aproximadamente a 3600 msnm y es colindante entre el centro poblado de Circamarca y el Distrito de Huancaraylla, que pertenecen a la Provincia de Víctor Fajardo, Departamento de Ayacucho.

Estas aguas son un espectáculo natural que deja sin aliento a quienes las visitan. Estas piscinas naturales, formadas a lo largo del río Millpu, destacan por su color turquesa intenso, que contrasta con las rocas blancas y la vegetación circundante. Este fenómeno se debe a la presencia de minerales como el carbonato de calcio en el lecho del río, que reflejan y refractan la luz solar, creando una gama de colores que varía entre el azul y el verde dependiendo de la hora del día y la intensidad de la luz.

La transparencia y el color de las aguas de Millpu también están influenciados por la pureza del agua, que proviene de manantiales y deshielos de las montañas cercanas. Este entorno prístino y bien conservado permite que las aguas mantengan su claridad y belleza, convirtiéndolas en un lugar único en el mundo.

Leyendas o mitos asociados a Millpu

Como muchos lugares de gran belleza natural en el Perú, Millpu está rodeado de leyendas y mitos que enriquecen su misticismo. Una de las historias más populares entre los locales es la leyenda de los «Apus» o espíritus de las montañas. Según la tradición, los Apus protegen las aguas de Millpu y a los visitantes que muestran respeto por la naturaleza. Se dice que aquellos que llegan con intenciones puras y un corazón abierto pueden sentir la presencia de estos guardianes espirituales y recibir su bendición.

Otra leyenda habla de una antigua princesa inca llamada Millpu, quien, escapando de una invasión, encontró refugio en estas tierras. La princesa, conocida por su belleza y bondad, rezó a los dioses para que protegieran a su pueblo y a ella misma. En respuesta, los dioses transformaron el río en una serie de piscinas turquesas como símbolo de pureza y protección. Hoy en día, se cree que el espíritu de la princesa Millpu sigue cuidando estas aguas, y que aquellos que las visitan pueden sentir su energía protectora.

Explorando Millpu: Qué ver y hacer

Visitar Millpu es una experiencia que ofrece múltiples actividades para disfrutar de su entorno natural:

Caminata

Al llegar, los visitantes pueden emprender una caminata por un sendero bien marcado que les llevará a lo largo de las piscinas naturales. Este recorrido, que dura aproximadamente dos horas ida y vuelta, permite admirar de cerca las aguas turquesas y los paisajes impresionantes.

Miradores naturales

Durante el recorrido, es común encontrar miradores naturales desde donde se puede obtener una vista panorámica del lugar. Estos puntos son perfectos para tomar fotografías y capturar la belleza del entorno.

Precio de las entradas

Desde abril del 2023, la entrada a Millpu tiene un costo de S/10.00 para adultos, S/5.00 para niños y S/15.00 para extranjeros.

La importancia de la conservación en Millpu

Millpu es un tesoro natural que necesita ser protegido para las futuras generaciones. La afluencia de turistas puede tener un impacto negativo en el ecosistema si no se gestionan adecuadamente. Es crucial seguir las normas y regulaciones establecidas para la conservación del lugar, como no arrojar basura, no extraer plantas ni animales, y respetar las zonas restringidas.

Las comunidades locales y las autoridades están trabajando en conjunto para implementar prácticas sostenibles que minimicen el impacto del turismo. Esto incluye la educación ambiental para los visitantes, la creación de infraestructura que reduzca la erosión del suelo y la promoción de un turismo responsable que valore y respete la naturaleza.

Desde noviembre del 2018, está prohibido bañarse en las Aguas Turquesas de Millpu para preservar el color turquesa del río. Solo se permite llegar hasta las orillas para tomarse fotografías.

¿Cuál es la mejor temporada para visitar Millpu?

La mejor época para visitar Millpu es durante la temporada seca, que va de mayo a setiembre. En estos meses, las lluvias son escasas, lo que facilita el acceso y el disfrute de las piscinas naturales. Además, el clima es más templado y las aguas suelen estar más claras, ofreciendo las mejores condiciones para la observación y la fotografía.

Durante la temporada de lluvias, de octubre a abril, el acceso a Millpu puede ser más complicado debido a los caminos resbaladizos y el aumento del caudal del río. Sin embargo, si decides visitar en esta época, podrás experimentar una versión diferente del paisaje, con una vegetación más exuberante y cascadas más caudalosas.

¿Qué comer en Ayacucho, cerca a Millpu?

La región de Ayacucho es conocida por su rica y variada gastronomía, que refleja la herencia cultural de los Andes. Cerca de Millpu, los visitantes pueden disfrutar de una variedad de platos tradicionales que deleitan el paladar y enriquecen la experiencia de viaje.

• Trucha Frita: Pescado fresco de los ríos andinos, servido con papas fritas y ensalada.
• Chicharrón ayacuchano: Carne de cerdo frita acompañada de mote, papas y salsa criolla.
• Sopa de Mote: Sopa elaborada con mote (maíz pelado), carne, verduras y hierbas locales.
• Patachi: Una sopa espesa a base de trigo, habas, carne de res y hierbas.
• Chapla: Pan tradicional de Ayacucho, con una textura suave y un sabor ligeramente dulce.
• Bizcochos de Huamanga: Dulces tradicionales elaborados con harina, manteca y anís.
• Puca Picante: Un guiso de papas y carne de cerdo con una salsa de maní y ají panca que le da su característico color rojo.

¿Cómo llegar de Lima a Ayacucho en bus?

Para llegar a Millpu, primero debes viajar desde Lima a Ayacucho, una ciudad rica en historia y cultura ubicada en los Andes peruanos. La distancia entre Lima y Ayacucho es de aproximadamente 573 kilómetros. El trayecto en bus ofrece vistas impresionantes de la sierra peruana, atravesando paisajes diversos y serpenteantes caminos de montaña. El viaje dura entre 9 y 12 horas, dependiendo de las condiciones del camino y la velocidad del bus. Al llegar a Ayacucho, te encontrarás a unos 116 km de Millpu, donde podrás continuar tu aventura hacia las mágicas piscinas turquesas.

La empresa Wari Palomino ofrece varios servicios para el viaje de Lima a Ayacucho, asegurando comodidad y seguridad. El Chasqui Bus cuenta con 49 asientos reclinables a 145°, servicios higiénicos, GPS, paradas en restaurantes autorizados, entretenimiento de audio y video, climatización y conectores USB. El Inka Class tiene buses de dos niveles con 12 asientos de 160° en el primer piso y 46 de 145° en el segundo, ofreciendo similares comodidades y servicios. El Inka Plus dispone de asientos panorámicos, salones VIP y ejecutivos, filtro purificador de aire UV y conexión streaming. Finalmente, el Killa Plus, con asientos de 160° en ambos niveles, también incluye filtros purificadores de aire, conexión streaming y snacks. Estos servicios garantizan un viaje confortable y seguro hacia Ayacucho.

¿Sabías que Ayacucho…?

• Es conocida como la “Ciudad de las Iglesias”. Con más de 30 templos coloniales, Ayacucho tiene una de las mayores concentraciones de iglesias en Perú, cada una con su propia historia y arquitectura única.
• Fue escenario de la Batalla de Ayacucho en 1824. Esta batalla fue crucial para la independencia de América del Sur del dominio español. El obelisco en la Pampa de la Quinua conmemora este importante evento histórico.
• Es famosa por sus retablos. Los retablos ayacuchanos son pequeñas cajas de madera que contienen escenas religiosas y cotidianas, elaboradas con gran detalle y colorido. Son una muestra del talento artesanal de la región.